Somos dos maestras de inglés, compañeras de nivel, y nos gustaría presentaros el último proyecto que diseñamos para 4º de primaria durante el tercer trimestre en confinamiento del curso pasado.
Esos días de enseñanza telemática generaron muchas dudas entre los maestros. Desde los centros, se nos aconsejaba realizar tareas de refuerzo y/o consolidación de los contenidos ya trabajados en los trimestres anteriores y plantear tareas evaluables de dichos contenidos.
Así pues, decidimos empezar un nuevo proyecto motivador, pero no avanzar en contenidos nuevos, sino consolidar los contenidos ya trabajados, desarrollando competencias y valores.
Nuestro punto de partida son los niños y niñas; ellos pueden aportar muchas cosas en estos momentos de crisis. Estas situaciones son una oportunidad para desarrollar nuevas habilidades y competencias. Creemos que esta experiencia del confinamiento debido al COVID-19 es una perspectiva excelente para fomentar el civismo, la responsabilidad y el compromiso social.
“No act of kindness, no matter how small, is ever wasted.” Aesop.
Después de leer la historia The Snail and the Whale y hacer una lluvia de ideas, nos sumergimos en un proyecto donde el alumnado tenía que identificar una necesidad o problema en su comunidad o en el mundo. Posteriormente, tenían que crear un Plan de Acción para hacer frente a esa necesidad o problema y comunicarnos los resultados de su proyecto mediante una presentación oral (Show and Tell). Finalmente, debían realizar una reflexión y autoevaluación de lo aprendido.
El propósito de este proyecto fue animar a nuestro alumnado a que proponga sus propias ideas para trabajar en un tema que realmente le motive y que se de cuenta de que con pequeñas acciones podemos conseguir grandes resultados.
En esta situación actual es muy importante ofrecerles herramientas para la autogestión del trabajo y la iniciativa personal, para que sean cada vez más autónomos en la realización de tareas ya que cada pequeña acción o gesto contribuye a conseguir nuestros objetivos.
